Cometido el cobarde asesinato, los presuntos homicidas cínicamente terminaron de desplumar a todos los pasajeros y con el botín en su poder, rápidamente bajaron de la unidad para darse a la fuga y perderse entre las oscuras calles del lugar, sin que hasta el momento se sepa nada de su identidad y posible paradero.
Los hechos que costaron la vida de este hombre, hasta el momento desconocido, de quien únicamente se dijo que era de entre 20 y 25 años de edad y que vestía una playera azul marino, pantalón de mezclilla azul, zapatos negros y chamarra y una bufanda gris, se registraron minutos antes de la media noche de ayer viernes, en el interior de una camioneta colectiva de la ruta 36, número económico 214, que circulaba sobre la carretera Chalco-Tláhuac, a la altura de la Colonia Xico, en este municipio.
Autoridades policiacas informaron que de acuerdo con las versiones que dio José Alberto García, de 25 años de edad, chofer de la camioneta colectiva, circulaba con toda normalidad por la zona, cuando de repente dos sujetos y una mujer que acababan de subir como cualquier otro pasajero se levantaron de sus asientos y al grito de “este es un asalto” sometieron y amagaron con armas de fuego a todos los usuarios.
Cuando los presuntos rateros comenzaron a quitarles todas sus pertenencias a los pasajeros, dijo el chofer, uno de ellos puso resistencia e incluso trato de enfrentar a los delincuentes, con la intención de evitar el asalto, por lo que uno de los hampones lo privó de la vida, al dispararle certero balazo en la cabeza, a la altura de la nuca.
A consecuencia del balazo, el malogrado pasajero cayó, casi instantáneamente muerto, en tanto que los presuntos delincuentes cínicamente todavía terminaron de “desplumar” a todos los usuarios, y ya con el botín en su poder emprendieron la famosa huida.
Posteriormente, en atención al llamado de auxilio de los vecinos, elementos de la Comisión Especial de Seguridad (CES) rápidamente arribaron al lugar e implementaron un fuerte operativo en toda la zona, a fin de ubicar y detener a los presuntos homicidas, pero no tuvieron suerte, pues escaparon sin dejar pistas de su paradero.
Más tarde, al tener conocimiento de los hechos, mientras que elementos de la CES resguardaban el lugar, el ministerio público se presentó y, una vez que realizó las diligencias ministeriales, ordenó el levantamiento del cadáver para dar inicio a la carpeta de investigación correspondiente por el delito de homicidio.
Por su parte, policías ministeriales aseguraron que ya iniciaron con las investigaciones correspondientes, y confiaron en que conforme avancen sus trabajos policiacos puedan identificar, ubicar y detener a los presuntos homicidas.
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