Cegado por el despecho, y con el fin de arruinarle la fiesta de cumpleaños a su ex esposa, él se encerró en una habitación de la casa de la festejada, y ahí se quitó la vida.
De acuerdo al reporte de las autoridades, la noche del sábado pasado Irene “N”, festejó su cumpleaños en su domicilio ubicado en el número 585 de la calle 71, en el fraccionamiento Villa Magna II, al Poniente de la ciudad, y entre los invitados estaba Miguel "N", de 38 años de edad, de quien hace unos meses se había divorciado.
Testigos dijeron que el hombre convivió tranquilamente y festejó con los demás invitados en la terraza de la vivienda, pero alrededor de las 4:00 de la madrugada del domingo se despidió de todos, argumentando que tenía que trabajar temprano y viajar hasta la ciudad de Progreso.
Sin embargo, ante la sorpresa de los asistentes, Miguel Ángel regresó media hora después y sin dar algún tipo de explicaciones entró a la casa de la festeja y puso el cerrojo a la puerta principal y se fue al baño.
Los invitados al darse cuenta de la acción dieron aviso a Irene, ya que había niños durmiendo en una de las recámaras, por lo que la festejada y los visitantes tocaron la puerta, pero ante la respuesta negativa y preocupación tomaron la decisión de llamar a las autoridades policíacas.
Momentos después al lugar llegaron varios agentes de la Secretaría de Seguridad Pública quienes forzaron la puerta del patio para ingresar a la casa, pero Miguel Ángel no estaba a la vista, por lo que empezaron a buscarlo y lo encontraron colgado en el cuarto de baño.
Al lugar de los hechos arribaron elementos de la policía para llevar a cabo el aseguramiento del área, además de peritos de la Procuraduría General de Justicia quienes se encargaron de levantar registros y llevar a cabo labores de campo.
Posteriormente autoridades ordenaron el traslado del cuerpo al Servicio Médico Forense.
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