Río de Janeiro, Brasil.- Los Juegos de Río de Janeiro arrancaron anoche en el estadio de Maracaná con la Tierra como eje de la ceremonia y un fuerte mensaje ecologista de homenaje al planeta.
La apertura enalteció, además, el orgullo de Brasil por su diversidad, la potencia de su música y la creatividad de sus favelas.
El mensaje de respeto al medio ambiente estuvo presente en toda la ceremonia y también celebró a los habitantes nativos de Brasil: los indígenas.
Con el estadio teñido de verde brillante, la paz de los indios se rompió con la llegada de los conquistadores europeos. Más tarde, el arribo de los esclavos africanos y los inmigrantes asiáticos ayudó a conformar el mosaico multicolor del pueblo brasileño.
La pujanza musical del gigante sudamericano también enmarcó el espectáculo, que cerraron Caetano Veloso y Gilberto Gil.
La bossanova puso el toque de elegancia cuando, al son de la mítica "Garota de Ipanema", de Tom Jobim y Vinicius de Moraes, la top model Gisele Bündchen cruzaba con pie firme el estadio para representar la belleza de la mujer brasileña.
Los atletas fueron aplaudidos con fuerza, en especial el Equipo Olímpico de Refugiados y las representaciones latinoamericanas.
Los mexicanos entraron pisando fuerte con la abanderada Daniela Campuzano al frente.
El punto culminante llegó cuando el maratonista Vanderlei de Lima encendió un enorme caldero que se elevó hasta poner en movimiento la espectacular estructura del pebetero, una especie de mecano integrado por espejos giratorios que reflejan el fuego a todo el estadio.
En contraste, por la mañana, la playa de Copacabana fue escenario de una protesta de unos 500 estudiantes contra el Presidente interino, Michel Temer, quien recibió un sonoro abucheo durante la ceremonia al declarar inaugurados los Juegos.
REFORMA/Foto: EFE
No hay comentarios.:
Publicar un comentario